Nadie dijo que el amor fuese un camino de rosas, por ello, en el ámbito sentimental te encontrarás con situaciones de todo tipo. Dentro del universo de las citas, existen encuentros para todos los colores y todos los gustos. Pero resumiendo, unas salen bien y otras en cambio, son un desastre y salen mal. En este sentido, la serie Sexo en Nueva York refleja el abanico de citas con el que se puede encontrar una mujer en su rutina diaria.
Pero lejos de la ficción, en el plano real, a veces, te ha podido suceder que después de estar preparando todo al detalle, cuidando todos los aspectos para organizar un plan romántico con la persona a la que quieres, te llamó por teléfono en el último momento para decirte que no podía ir. Ya sea por una emergencia o directamente porque no le apetecía salir.
Y de forma curiosa, en ese momento, el mundo parece que se viene abajo porque lo primero que piensas es que la otra persona no quiere estar contigo. Nada más lejos de la realidad, son cosas que pasan y no se pueden evitar. Por ello, a veces, verás que después de una decepción de este tipo te llevas una sorpresa increíble porque tú ya lo habías dado todo por perdido.
En otras ocasiones, la primera cita puede ser un horror. En este caso es más habitual, sencillamente, porque todavía no conoces bien al otro. Por tanto, los nervios también juegan malas pasadas. Pero en ocasiones, puede suceder que no haya conversación ni temas de interés común, del mismo modo, puede faltar química y el aburrimiento llega antes de lo esperado. En ese caso, puedes dar otra oportunidad para comprobar que realmente, las cosas no fluyen como deben o directamente, cerrar la puerta al amor si ves las cosas muy claras.