Existe un paso que puede ser costoso pero que es muy importante poner en práctica: cambiar de actitud en el desamor. Es decir, adoptar una perspectiva distinta en una vivencia de decepción personal. Asumir que la realidad es la que es y que el mejor modo de combatir el sabor amargo de una ruptura sentimental o de un amor no correspondido es evitar la autocompasión y el rol de víctima para ser protagonista de la propia vida. ¿Cómo cambiar de actitud en el desamor?
Recuerda todo lo que ganas
En primer lugar, recuerda todo lo que ganas si te animas a poner en práctica un cambio positivo: mejor estado de ánimo, mayor calidad de vida emocional, mejores relaciones personales y menor sensación de tristeza. Además, este reto también es un aprendizaje muy valioso puesto que desde el punto de vista personal, un cambio de actitud puede ser saludable en contextos muy distintos. ¿Qué ganas en cambio si sigues pegado a una actitud pesimista? Permanecer estancado en un sufrimiento que se agrava a partir del propio pensamiento.
Qué gestos no te gustan en los demás
¿Qué gestos no te gustan cuando un amigo tuyo está sufriendo por un desamor? Por ejemplo, puede que te resulte agotador que las conversaciones con él se reduzcan a aquello que le ha sucedido. Podemos perder la objetividad al analizar nuestros propios hechos como consecuencia del impacto de la emoción. Sin embargo, si analizas aquellas actitudes externas que te gustaría minimizar en una etapa de desamor, estarás dando un cambio de actitud importante.
Hazte la pregunta adecuada
En una etapa de desamor, es frecuente que aquel que está sufriendo se haga preguntas a sí mismo. Existe una pregunta que solo produce más tristeza: ¿Por qué me ha pasado esto a mí? En cambio, puedes minimizar el impacto del sufrimiento emocional a través de la pregunta indicada: ¿Qué voy a hacer desde hoy mismo para retomar las riendas de mi vida?