El contacto con la naturaleza es uno de los planes de entretenimiento más gratificantes en cualquier momento de la vida, todavía más en una etapa de desamor, cuando la experiencia de tener el corazón vulnerable incrementa la fragilidad emocional. Y en medio del contacto con los espacios naturales, surge una catarsis anímica. ¿Qué cuatro beneficios producen los paseos por la naturaleza?
Respirar el aire puro
El placer de respirar el aire puro te hace sentir en armonía con el equilibrio que rige todo lo natural. Sientes que formas parte de ese todo trascendente que se encuentra ante tus ojos en la forma de un paisaje infinito. El ejercicio natural de la respiración adquiere un matiz distinto, más profundo, conectas con el presente a modo de causa y efecto.
Una agradable evasión
El escenario natural es tan diferente a los espacios urbanos de la ciudad que el contacto con la naturaleza es una agradable experiencia para romper la rutina a través de un plan de ocio sencillo pero que produce tantas sensaciones y emociones agradables como la ilusión, la serenidad, la calma y el bienestar.
Reduce el estrés
El desamor puede producir una amargura y una incertidumbre de futuro que aumenta el pensamiento negativo. Sin embargo, durante el desamor existen muchas terapias distintas para aliviar las heridas. Una de esas terapias es el contacto con la naturaleza. Es natural sentir dolor en una situación de este tipo, sin embargo, el bienestar que produce el contacto con lo natural genera una especie de anestesia que calma las heridas de un modo depurativo.
Desconectar de las tecnologías
Actualmente, el proceso del olvido resulta más complejo porque cualquier persona tiene la puerta abierta para consultar novedades de la vida de su ex a través de las redes sociales. Sin embargo, el contacto con la naturaleza es tan saludable porque reduce el estrés tecnológico.
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