Las decepciones forman parte de la vida puesto que tener expectativas es una manifestación del propio acto de estar vivo. Las decepciones sentimentales duelen, sin embargo, la vida continúa. ¿Cómo ser feliz entonces?
Confía en tu capacidad de ser feliz
Comienza por algo tan instintivo como recuperar la fe en tu propia fortaleza vital y en la realidad de que a pesar de lo que ha ocurrido, tu corazón y tu mente están perfectamente capacitados para experimentar la alegría, la motivación y la verdad de la rutina cotidiana.
Acepta la realidad
Cuando te resistes a aceptar una realidad tal y como ha sido, entonces, convives en lucha interna con ese hecho que te afecta de manera negativa. La aceptación puede no ser sencilla en un primer momento, sin embargo, te compensa pasar a ese punto en lugar de estar estancado en esta situación.
Amistad
Cuando tu corazón está afectado por la herida del desamor, entonces, surgen las satisfacciones y las motivaciones de la amistad. Invierte atención, reflexión, tiempo e interés en planes con amigos que son tu principal aliciente vital.
No olvides practicar el tipo de amistad más importante: aquella que comienza contigo mismo. No te culpes de manera negativa en este momento por lo que ha pasado.
Sentido del humor
¿Cuál es la perspectiva que tienes de esta situación? Si buscas el lado cómico es posible que te resulte más llevadero pasar esta decepción con el factor agradable de la risa. El sentido del humor puedes estimularlo a través de las comedias del cine, el teatro, los chistes y la risoterapia.
Cada momento tiene su belleza
Esta puede ser una buena filosofía de vida; comprender que las circunstancias cambian. Sin embargo, cada día amanece y surge una nueva oportunidad de realización personal. ¿Cómo ser feliz a pesar de las decepciones? Entendiendo que tu vida no se reduce a esta insatisfacción.