Existe una sensación muy frecuente después de la ruptura: la añoranza. El pasado está muy presente en la memoria de quien está experimentando un proceso de adaptación al cambio. Y, sin embargo, la nostalgia no implica el amor en mayúsculas que puede sentir aquel que desea una nueva oportunidad. ¿Cómo diferenciar la añoranza de este deseo de retomar la relación nuevamente?
1. Reflexiona en torno a tus sentimientos
Si echas de menos a tu pareja, intenta contextualizar este sentimiento al entender que se trata de un hecho natural después de haber compartido un tiempo en común.
La añoranza es la consecuencia de la despedida. Sin embargo, si deseas retomar la relación con tu ex, profundiza en torno al motivo de este deseo. Un anhelo que debe ir más allá de la razón de la nostalgia en sí misma.
2. La nostalgia mira al pasado
Cuando rompes una relación de pareja, inicias una nueva etapa en tu vida. Sin embargo, la perspectiva de la añoranza conduce al pasado. A través de esta mirada revives un tiempo que ya ha quedado atrás. ¿Te gustaría volver al ayer porque objetivamente crees que esa persona es el gran amor de tu vida o echas de menos aquella rutina en la que te sentías cómodo?
3. El tiempo te ayudará a encontrar tu respuesta
Cuando el momento del adiós está tan reciente en la memoria, no cuentas con la distancia temporal que te aporta el paso de las semanas. Intenta tener paciencia para iniciar esta nueva etapa asumiendo que la añoranza forma parte de este proceso de aprendizaje en el que puedes reencontrarte contigo mismo.
¿Y cómo diferenciar la nostalgia y el amor después de la ruptura de pareja? Respondiéndote esta pregunta de forma sincera sin dejarte condicionar por el miedo a la soledad o a no volver a sentir algo tan especial.