La felicidad es un bien que merece disfrutarse ahora. En ocasiones, se pospone de forma indefinida ante la ocupación inmediata de otras tareas. Eso implica que el disfrute se traslada a otro contexto. En Son Pareja te damos cinco consejos para no aplazar la felicidad.
1. Planifica espacios de ocio en tu agenda
¿Qué ocurre cuando el trabajo y otras obligaciones diarias ocupan incluso el tiempo libre? La persona no disfruta de espacios personales destinados al ocio. Por ello, es recomendable integrarlos de forma anticipada en la programación de los próximos días.
2. Consejos para no aplazar la felicidad: no des por supuesto el futuro
El síndrome de la felicidad aplazada parte de una premisa equivocada: considerar que el mañana es una certeza absoluta. Sin embargo, solo existe el ahora. La felicidad aplazada se sitúa en el plano de un futuro hipotético.
3. Cuídate a ti mismo para no aplazar la felicidad
¿Qué efecto produce la postergación de los momentos de alegría? Esa inercia hace que te descuides a ti mismo. Ten en cuenta que no escuchas verdaderamente tus emociones, tus sentimientos y tus necesidades. No les das el espacio que merecen en tu presente. Tapas esa información con las ocupaciones constantes.
4. Realiza una lista con todo aquello que pierdes
La felicidad aplazada parece aportar algún aspecto positivo. Se sitúa como una expectativa de futuro que alimenta la motivación. Sin embargo, te quita mucho más de lo que te aporta. Realiza una lista con los factores negativos de esta experiencia. ¿Cuánto tiempo de tu vida estás verdaderamente conectado al presente? ¿Cuántas horas inviertes en la proyección de un futuro que no ha llegado? Poner el foco en el ahora no significa descuidar la planificación del proyecto de vida personal.
5. Date el permiso para ser feliz
La autoexigencia y el perfeccionismo producen un peso elevado en forma de estrés y cansancio. Date el permiso para disfrutar hoy, aquí y ahora.
¡Te damos cinco consejos para no aplazar la felicidad y vivir el presente!