La vida es una aventura fascinante pese a que muchas personas ni siquiera se dan cuenta del gran reto que tienen por delante. Vivir en letras mayúsculas es todo un regalo que te permite crecer cada día, superarte a ti mismo, caerte y volver a levantarte con más fuerza, llorar, reír, en definitiva, ser feliz. Y es que, el ser humano desde la cuna tiene un reto en este mundo: alcanzar la felicidad. Esa palabra abstracta que sin embargo, define el mayor bien del alma humana.
Existe una película de Julia Roberts y Javier Bardem que en cierto modo muestra que la vida humana implica de un alto grado de conciencia interior, sabiduría vital y capacidad de cambio para adaptarte a las novedades del destino. Come reza ama (de cuya película está tomada la imagen de este artículo) refleja un proceso de búsqueda personal que no es inmediato sino largo. Por otra parte, la vida es más bonita y más real cuanto más ames. Por tanto, no vayas midiendo tu cariño, ni dosificando el interés que tienes por los demás. Sé generoso, estate abierto a la posibilidad de hacer nuevos amigos, deja que las personas te sorprendan, y ahora que estamos en unas fechas tan mágicas, intenta vivir estas Navidades de tal forma que merezcan la pena de verdad.
Por otra parte, también es esencial aprender a sentir. Sentir el dolor de los demás, también sus alegrías, palpar sus silencios y sus palabras, estar atento a las necesidades emocionales de los otros… Y en un momento de crisis económica, estar atento también a las necesidades materiales en tanto que todos podemos aportar algo bueno en la construcción de un mundo mejor.
Cada persona tiene su propio camino, además, alguien tiene más suerte o menos suerte en función de las circunstancias. Pero debes animarte a ir más allá de dichas circunstancias. ¿Te atreves?