La distancia produce ruptura de expectativas en la amistad cuando uno de los dos no comprende el comportamiento del otro. El distanciamiento puede producirse por cuestiones que no tienen que ver con la propia amistad. A veces, por ejemplo, puede ocurrir que la persona esté pasando un mal momento y esté menos receptiva ante los planes.
El efecto de las preocupaciones también produce un peso en el estado de ánimo. En otros casos, es la falta de comunicación la que genera los supuestos y los malos entendidos en torno al estado mismo de la relación. ¿Cuáles son los síntomas que pueden indicar que un amigo se está distanciando?
Añoranza habitual
Le echas de menos de forma frecuente y has notado un cambio significativo respecto a la amistad, pasa el tiempo y la situación no cambia sino que la distancia va a más. Este es un matiz significativo cuando observas la historia de este vínculo y desde la perspectiva del tiempo vivido en común puedes comparar el antes y el después. Tal vez no sepas qué ocurrió exactamente pero sí identificas un punto de inflexión. Está ausente en tu vida y esto sí es algo que experimentas a nivel interno.
Menos comunicación
La distancia se traduce en menos interacciones a través del teléfono, menos tiempo compartido en común y conversaciones sobre temas más impersonales cuando estáis juntos. De hecho, esta suma de detalles hace que el vínculo todavía se enfríe más. En ocasiones, la ruptura no es literal sino un distanciamiento progresivo.
Ruptura de expectativas
De manera recurrente experimentas cierto desengaño al depositar unas expectativas que están alineadas con el desarrollo previo de vuestra amistad, y la respuesta que observas por su parte que está más contextualizada en el marco de la realidad presente. En tu interior, tienes la certeza de que algo ha pasado.