Existen causas de sufrimiento que se producen en el contexto de la amistad o el amor. Por ejemplo, el distanciamiento repentino de alguien especial puede dejar al afectado inmerso en una sucesión de dudas y preguntas. Hay un concepto que adquiere un significado muy importante para cuidar los lazos emocionales. ¿Qué es la responsabilidad afectiva y cómo influye en las relaciones?
Descubre qué es la responsabilidad afectiva
El compromiso que tienes contigo mismo pero también con el otro. La toma de conciencia en torno al efecto y la huella que producen palabras y acciones. De este modo, puedes hacerte responsable de lo que dices y de lo que haces. Así ocurre cuando eres consciente de que palabras y hechos producen un efecto en los demás. A través de la responsabilidad afectiva nutres las emociones y sentimientos de los que te rodean. Por ejemplo, cuando realizas una promesa, sabes que tus palabras producen expectativas en el interlocutor.
Qué es la responsabilidad afectiva y cómo influye en las relaciones
Existen distintas variables que influyen en la formación de nuevas relaciones. Pero pueden ser especialmente determinantes para su evolución y desarrollo. La falta de responsabilidad afectiva en uno o ambos incrementa la frustración, la desilusión, el distanciamiento, la decepción y el desgaste. Por el contrario, el compromiso que cada uno muestra en el cuidado del vínculo hace que los protagonistas se sientan verdaderamente valorados en el seno de esa historia.
Un escenario imprevisible eleva la incertidumbre y la soledad. Uno de los ejemplos más representativos de la falta de responsabilidad afectiva es el silencio repentino y definitivo que muestra aquel que decide alejarse de la vida del otro sin dar ningún tipo de explicación. La comunicación asertiva, la expresión emocional, la sinceridad, el respeto y la simetría son conceptos que están muy presentes en la práctica de la responsabilidad afectiva.