Una relación de pareja es como un baile en donde el ritmo se alimenta del compás de ambos. Sin embargo, hay muchas situaciones que pueden romper ese compás. ¿Qué cosas no debes permitir a tu pareja, por mucho que le quieras?
Que te haga responsable de su felicidad
Tu pareja tiene una edad. Es autónoma desde el punto de vista vital. Tiene la capacidad de luchar por sus sueños y avanzar en su camino. Por esta razón, no dejes que tu pareja te cargue con el peso de su felicidad porque tú tienes que ocuparte de la tuya propia.
Que te culpe por sus frustraciones
Existen muchas formas de chantaje emocional en la pareja. En ocasiones, cuando una persona está frustrada por su propio sufrimiento, puede descargar su ira con su entorno más cercano. Pero no dejes que tu pareja te ponga en este rol.
Que domine tu vida
Tu pareja no tiene derecho a decidir sobre tu vida por mucho que opine de un modo diferente a ti en algún aspecto. Tu vida es tuya y tu pareja debe respetar tu libertad de decisión.
Que invada tu intimidad
Tu pareja tampoco tiene derecho a mirar tu teléfono móvil porque la información que contiene es personal. Pero además, es importante no caer en juegos de falsas demostraciones de confianza. Por ejemplo, no des las contraseñas de tus redes sociales o correo electrónico a tu pareja porque este gesto no muestra confianza entre ambos, sino el principio de la manipulación. Porque por muy enamoradas que estén dos personas, cada una tiene derecho a su intimidad.
Que te trate como un objeto
Eres una persona y como tal, cualquier acción que vaya en contra de tu dignidad es dañina en el amor. Cuando una persona cosifica a otra está actuando en contra de su verdadera esencia.
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