Aunque con frecuencia tendemos a vincular el amor con el corazón, en realidad, amar también es una cuestión de decisión mental. Por esta razón, el proceso del olvido comienza por la conciencia de saber que ya no quieres seguir depositando tus esperanzas y expectativas en una persona que no te corresponde. Verbalizar la realidad en voz alta, es decir, expresar con naturalidad esta no correspondencia es un paso importante para no convertir esta herida psicológica en un dolor crónico.
Cómo dejar de amarle
La lógica no solo se aplica a las matemáticas. La lógica del corazón también es muy saludable. Y en esencia, no tiene ningún sentido que una persona siga poniendo todas sus ilusiones en alguien que no le corresponde, muestra indiferencia y no está en el mismo punto personal. Para olvidarle, en lugar de enfocarte tanto en tu propio amor, escuchar también el dolor que sientes por saber que no eres correspondido. Este dolor es tan incómodo y frustrante que, no lo prolongues más en el tiempo. Experimentar enfado e ira en este momento, puede ser una buena fórmula para activar la resiliencia frente a este rechazo.
Este es un buen momento para potenciar la liberación de corazas emocionales, para romper con tanos estereotipos que te limitan ahora mismo. Y conectar nuevamente con la verdad de tu interior para ser feliz y vivir el presente. Enfócate en ti: en tu historia, en actividades que quieres llevar a cabo, relaciones de amistad e ilusiones.
Tú tienes mucho que ofrecer
Con frecuencia, cuando una persona siente que nunca podrá olvidar a otra es porque se concentra en exceso en idealizar a ese alguien. Si estás en esta situación, recuerda que la otra persona pierde la oportunidad de conocerte mejor. Porque tú eres una persona valiosa que puedes ofrecer mucho a los demás.