Los inicios de las relaciones personales son más importantes de lo que parecen a simple vista ya que esas primeras impresiones pueden hacer que una persona cierre la puerta a otra si observa gestos que no le gustan. Hay tres actitudes que es positivo evitar, especialmente, al inicio de una amistad cuando el vínculo no es sólido y fuerte para resistir la decepción. En este artículo, enumeramos estas tres actitudes concretas que es mejor evitar para hacer amigos.
Anular un plan en el último momento
Un gesto que muestra una falta de seriedad y de compromiso en las relaciones personales es haberte comprometido a un plan en concreto y en el último momento, buscar una excusa para no acudir. Algunas personas se rigen mucho por el apetecer de cada momento. Pero la paciencia de los demás, también se agota.
En el caso de que por alguna razón, tengas que anular un plan en el último momento cuando has quedado con alguien a quien estás conociendo, es aconsejable que llames por teléfono para poder hablarle y expresarte. Del mismo modo, también es recomendable que en ese mismo instante aproveches el momento para concretar un nuevo día para quedar. De este modo, la otra persona notará que realmente tienes interés en verle.
Improvisar el plan en el último momento
En relación con el punto anterior pero de un modo distinto, algunas personas también tienden a improvisar sus planes en el último momento. A ti te encantaría poder planificar un plan con tiempo para organizarte y, sin embargo, siempre que te avisa para quedar es con un margen de dos horas. Este tipo de planes improvisados también son muy divertidos, sin embargo, teniendo en cuenta que cada persona tiene su vida, y que cuando no conoces todavía bien a alguien tampoco sabes su agenda, es recomendable facilitarle la posibilidad de quedar, avisándole con un margen de dos días o incluso, alguno más.
Las quejas constantes
Cuando estás conociendo a una nueva amistad, es positivo que intentes no centrar tus conversaciones en quejas, pensamientos negativos y enumeración de decepciones. La otra persona podría sentirse utilizada ante la aparente falta de interés del otro por conocerle.