Te tienes a ti mismo


No sufras más porque te tienes a ti mismo, es decir, cuentas con tu fuerza de voluntad, tu capacidad de superación personal y el poder de disfrutar en soledad para sentirte bien contigo mismo y para crecer en libertad. De hecho, debes aprender a ser tu mejor amigo, acercarte a personas que te convienen y alejarte de aquellos que te hacen daño. Dentro de ti tienes la sabiduría necesaria para escuchar tus emociones y saber cuándo hay algo que te duele de una forma que no puedes soportarlo más. En ese caso, ha llegado el momento de alejarte y de poner un cambio en tu vida.

Por el contrario, también debes escuchar todas esas emociones y sensaciones agradables que tienes en tu día a día y que te llevan a vivir mejor, que te hacen sentir en plena forma a nivel anímico, sientes alegría y paz interior. Por ello, en vez de convertirte en tu mayor enemigo, juzgarte y ser crítico, debes tener compasión en ciertos momentos, comprenderte y perdonarte tantas veces como haga falta. Tú eres tu mejor amigo y como tal debes quererte.

Es esencial cuidar de la propia autoestima para no dar importancia a cosas que no la tienen y tener un orden de prioridades en el día a día. Por otra parte, también debes premiarte por tus logros personales y profesionales. En el día a día, intenta hacerte la vida agradable y positiva, haz cosas que te gustan, cultiva tus aficiones, vive en plenitud…

Piensa en los demás, apuesta por la solidaridad y la ayuda social, pero antes de todo eso, piensa en ti mismo y cierra la puerta al mundo cuando lo necesites para encontrarte con tu verdadera esencia.

Deja una respuesta