Sin duda, la tecnología ha traído una nueva modalidad en el ámbito del amor y de las rupturas. Lo cierto es que pocas personas se declaran, por ejemplo, a través de un mensaje de móvil. Sin embargo, cada vez es más habitual que se produzcan rupturas a través de este sistema. ¿Por qué?
En primer lugar, porque para muchas personas es una forma de dejar a la otra persona sin tener que dar la cara, mirarle a los ojos, y explicarle los motivos del adiós. Para algunas personas, un mensaje de texto contiene los caracteres necesarios para pronunciar lo esencial. Sin embargo, aquel que recibe un mensaje de este tipo tarda mucho tiempo en entender este gesto porque se siente infravalorado y en cierto modo, también siente que le ha faltado el respeto.
Un mensaje de texto es muy positivo para quedar con los amigos, hacer planes, tener un gesto positivo… Sin embargo, una ruptura es muy incómoda se haga a la cara o se haga de otra forma, por ello, mejor hacer las cosas bien pensando en que el otro se merece lo mejor. Y también, pensando en la dignidad de la persona. Después de una ruptura, la otra persona también merece poder decir cómo se siente y mostrar su enfado.
Algo que no se le permite cuando esa ruptura es a través de un mensaje de texto. Tampoco conviene dar este paso por una llamada de teléfono. Por supuesto, todo tiene sus matices, y en caso de tener una relación con alguien que se encuentra a kilómetros de distancia, entonces, puede que esa sea una opción posible. Sin embargo, dentro de que una ruptura nunca es un plato agradable, a no ser que se esté deseando por ambas partes, lo positivo es dar la cara. Y tener madurez.