La Navidad es una época familiar, de compartir tiempo en común y hacer planes con aquellos que queremos. Los reencuentros son típicos de unas fiestas que producen sensaciones diferentes. Por una parte, aquellos que viven marcados por la muerte de un ser querido, enfrentan la Navidad como un tiempo de tristeza. Sin embargo, vale la pena adoptar la actitud adecuada para tener alegría, ilusión y mucha fuerza. Y es que, al final, no hay nada como vivir el presente centrado en el ahora.
Pues bien, la Navidad también es una época especial para hacer un regalo especial a la pareja y sorprenderle con algo que sabes que le gusta. Existen muchos tipos de regalos diferentes, algunos son económicos, pero también, existen los regalos más emocionales o espirituales. Un regalo emocional puede ser el de esforzarte de una forma consciente por hacerle pasar un buen día a tu pareja, por tanto, cuidando todos los detalles de la convivencia.
Preparando un menú que sabes que le gusta, esforzándote en crear un clima adecuado, centrándote en sus intereses y no en los tuyos… Por otra parte, también hay actividades de fin de semana que se pueden tomar como un regalo: un viaje, ir al cine para ver una película romántica, ir al teatro o a un concierto de música.
Por otra parte, a nivel material, las opciones de regalos son infinitas, de hecho, para disfrutar con el proceso puedes irte una tarde para mirar tiendas y escaparates y así, tomar algunas ideas: ropa, un perfume, libros, un disco de música, joyas, un juego… Las opciones son muchas por ello, deja volar tu imaginación para soprender de una forma diferente a tu pareja en estas vacaciones de Navidad que ya están a la vuelta de la esquina. No dejes todos los detalles para el último momento.