Existen historias de amor de todo tipo como bien podrás observar en tu entorno más cercano a través de tus amigos y tus familiares. Algunas personas comienzan una historia en la adolescencia y pasan toda su vida juntos. Por el contrario, también existen casos de personas que descubren el verdadero amor después de los cuarenta o los cincuenta años. Del mismo modo, hay quienes no pueden olvidar un amor del pasado y se quedan estancados.
Pero existe una tónica en el amor que es más universal de lo que parece. Muchas personas, se han planteado en algún momento de su vida si merecía o no la pena darse una segunda oportunidad con su pareja. Es decir, volver a intentarlo de nuevo. ¿Crees que es posible empezar de cero?
Existe un dicho popular que dice que segundas partes nunca fueron buenas. Pero la realidad es que a veces, el hecho de haber perdido a alguien te hace valorarle mucho más y darte cuenta de lo que te importa. En ese caso, cuando ambas partes son conscientes de que quieren apostar de verdad el uno por el otro y corregir sus errores, entonces, esta segunda oportunidad puede ser muy bonita puesto que ningún amor es tan dulce como aquel por el que se trabaja y se lucha.
Las segundas oportunidades además, son propias de aquellos que no se dan por vencidos a la primera. En el amor también hay que ser perseverante y constante. Esto no significa que en cualquier historia merezca la pena una segunda oportunidad puesto que a veces, te es suficiente con el tiempo que has conocido a una persona para darte cuenta de que te apetece compartir tu vida con ella. En el fondo, la decisión debe ser libre y meditada en lo más hondo del corazón.