La falta de autoestima genera muros en la vida de una persona, produce sensación de inferioridad, sensación de no valer los suficiente, creencias negativas de uno mismo, miedo al fracaso, un nivel bajo de expectativas… Todos esos ingredientes, enmarcados en el contexto del amor, pueden hacer que una historia se trunque por completo más allá de que haya algo de interés por ambas partes. La negatividad constante que desprende una persona que tiene una baja autoestima es difícil de superar más allá de la buena voluntad y de las buenas intenciones: para que alguien te quiera de verdad, en primer lugar, tienes que convencerte de que eres alguien digno de ser amado.
De lo contrario, nunca creerás en los sentimientos ajenos, pondrás a prueba constantemente a la otra persona, querrás que cada día te demuestre una y otra vez, que es verdad lo que te dice. Una persona con un nivel bajo de autoestima, vive con la sensación de ser engañada porque el pensamiento constante que tiene en mente es: ¿Cómo puede quererme a mí de verdad cuando podría estar con cualquier otra persona?
La falta de autoestima se refleja ya en el proceso de seducción en el lenguaje corporal. Una persona con una baja autoestima lo que hace es mirar al suelo constantemente en vez de a los ojos del interlocutor. Su deseo es pasar desapercibida, que se note su presencia lo menos posible.
Mejorar la autoestima es un trabajo personal, aunque sin duda, tener al lado a una persona que te quiere y que te valora de verdad te ayudará mucho para ser más feliz y poder mejorar la imagen que tienes de ti mismo. Por ello, para mejorar la autoestima, también es posible iniciar un curso sobre crecimiento personal, con el objetivo de disfrutar del momento presente y desplegar las alas de verdad.