Tener una pareja estable implica tener una relación que va más allá del gustar o la atracción física. Puede que en algún momento de tu vida te haya gustado alguien totalmente contrario a ti en valores, proyecto de vida y aficiones. En ese caso, el tema se complica porque el amor no fluye con facilidad. Aquí tienes cuatro síntomas de compatibilidad en una pareja estable.
En primer lugar, al hablar de futuro, no sientes angustia porque su modelo de vida no es muy diferente del tuyo, de hecho, podéis llegar a acuerdos y a puntos en común en relación con ese mañana ideal que queréis vivir. Una relación que solo tiene presente, tarde o temprano llegará a su fin. La realidad es que la proyección en el futuro es necesaria para luchar y apostar por alguien.
Por otro lado, en relación con el tiempo de ocio, también tenéis aficiones y gustos comunes. Lo pasáis bien quedando con los amigos, asistiendo a conciertos… O por el contrario, ambos sois tranquilos y os gusta pasar mucho tiempo en casa. Tanto en una opción como en otra, estar de acuerdo en el modo de disfrutar el ocio también es un factor añadido que une a una pareja. Pero eso sí, tener aficiones diferentes, no es motivo de ruptura ya que siempre es posible llegar a pactos.
Los valores son muy importantes en la vida de una persona ya que son su suporte emocional. El criterio para diferenciar lo correcto de lo incorrecto. En este sentido, es positivo que tanto él como ella tengan unos valores compatibles, especialmente, a la hora de educar a los hijos y formar una familia. Una pareja es compatible cuando la historia fluye con facilidad y con naturalidad, sin cambios bruscos, ni giros inesperados. La sencillez en el amor es un valor en alza.