Existe una decisión difícil como la de anular una boda, especialmente, cuando las invitaciones ya fueron enviadas a los invitados. Sin embargo, existe algo que es más importante que esta planificación nupcial: tu vida y el momento posterior a este enlace. ¿Cuáles son las razones que pueden conducir al momento de cancelar la boda?
Tienes dudas importantes
Es humano tener algunas dudas en relación con la decisión de una promesa de boda por la responsabilidad que esta decisión plantea y la imposibilidad de adivinar el futuro. Sin embargo, cuando como consecuencia de estas dudas tienes una lucha interior constante es recomendable que intentes aclarar previamente qué es lo que verdaderamente deseas hacer.
Piensas en otra persona de manera frecuente
Cuando tomas la decisión de casarte, compartes un proyecto de vida con otra persona. No solo una infidelidad puede afectar a la confianza en la pareja, sino también el hecho de que uno de los dos tenga su pensamiento y su corazón centrado en alguien que le gusta de manera especial.
Miedo a la soledad
Por ejemplo, una persona puede tomar la decisión de casarse ante la creencia de que se encuentra ante su última oportunidad o porque piensa que se encuentra en una edad en la que ha llegado el momento de dar este paso.
Problemas importantes entre ambos
Una pareja no cambia por el hecho de casarse, es importante no visualizar este paso desde la idealización de una felicidad que es la consecuencia de este momento. Los problemas presentes seguirán estando allí después de la boda, tal vez incluso tengan mayor intensidad. Por ello, es positivo que cancele la boda aquel que considera que esta decisión puede transformar la relación. Por ejemplo, es recomendable cancelar la boda cuando uno de los dos tiene la falsa creencia de que la otra persona cambiará con el compromiso.