El miedo es un sentimiento que también tiene una función positiva al ayudarnos a ser más prudentes en determinadas ocasiones. Sin embargo, cuando experimentamos el temor ante una desilusión, en realidad, estamos interpretando antes de tiempo aquello que puede ocurrir cuando no ha pasado todavía. La desilusión forma parte de las posibilidades del juego de la existencia cuando te arriesgas en un plano determinado de tu vida y aquello que acontece se aleja de aquello que habías imaginado en un primer momento.
Cómo encontrar el equilibrio en la ilusión
En lugar de observar esa situación desde una posición de indefensión, y en lugar de sufrir antes de tiempo por algo que no ha pasado todavía, intenta vivir el presente, sabiendo que si llega ese momento, lo afrontarás aunque duela. ¿Cómo superar el miedo a la desilusión? Encontrando el equilibrio entre la ilusión misma y la realidad.
No pierdas la perspectiva de lo que acontece en el aquí y en el ahora. Quizá tengas una intuición que puede ser cierta. Pero date el tiempo que necesites para descubrirlo. Observa las señales de la realidad para intentar no caer en el riesgo de las altas expectativas. No siempre es fácil alcanzar este punto cuando la propia inercia de la ilusión en el enamoramiento puede hacer que tu imaginación evoque momentos que todavía no se han producido.
Esta ilusión forma parte de tu vida en este momento. Pero no hagas de esta vivencia toda tu existencia. Aunque por su propia naturaleza, esta novedad te motive de una forma especial, ocupa tu tiempo y tu vida con otros asuntos.
Vive el presente
Dar un peso excesivo al efecto de una posible desilusión ya es una desilusión en sí misma. Porque este hecho te está condicionando actualmente. Lo que tenga que pasar pasará al margen de tu preocupación por este tema.