Existen muchas formas diferentes de vivir la soltería o la vida en pareja. Algunas personas se casan con alguien creyendo que ese es su último tren. Y otras personas sufren cierto dolor anímico cuando están solteras y observan esta situación como definitiva en sus vidas, en contra de su propio deseo interior. Sin embargo, creen que ya es tarde para conocer a alguien interesante, creen que el hecho de que se produzca esa posibilidad es prácticamente un milagro a juzgar por la mala suerte que han tenido hasta el momento. Estar soltero cuando ese no es tu deseo verdadero es distinto a vivir una situación elegida.
Lucha por superarte a ti mismo
Sin embargo, al margen del factor de la voluntad, la realidad es que en tu vida, existen muchos aspectos que probablemente no sean tal y como tú habías imaginado y deseado hace un tiempo. La vida no es ser feliz con todos los anhelos cubiertos, sino tener la sensación de que estás en el camino de sacar el mejor partido posible a las circunstancias presentes. Por esta razón, si sufres por este motivo, comprende que tal vez tienes que dejar de compadecerte por este asunto y dejar de idealizar la vida de los demás.
Además, también puedes observar como algo muy positivo estar soltero en el contexto social actual, donde el hecho de no tener pareja no es una connotación negativa como sí lo era hace unas décadas, un tiempo no tan lejano que poco a poco se está superando gracias a la independencia económica de hombres y mujeres.
Vivir la vida como un regalo
Puedes encontrar tiempo para desarrollarte como ser humano a través de metas tan importantes como la amistad, el estudio, el turismo, los placeres sencillos, y por supuesto, el amor. Porque nunca sabes en qué momento puedes vivir una cita inolvidable. Pero no dejes que tu felicidad dependa solo de eso.