El deseo de ser amado se esconde en el corazón de todo hombre y de toda mujer, se trata de la necesidad de recibir cariño, atención, reconocimiento… Por ello, todo deseo siempre tiene un miedo añadido. En este caso, cualquier persona tiene que aprender a controlar su temor de no ser amada. ¿Cómo superar el miedo al rechazo?
En primer lugar, sé tú mismo siempre. No bases tus relaciones en el deseo de agradar a los demás, porque en ese caso, lo único que puede pasar es que un día te des cuenta de que no te gusta como eres y termines rechazándote a ti mismo. La vida se vive en primera persona, es decir, tú eres quien pone tu sello personal y tu valor a tu realidad presente.
Expresa lo que sientes, no te guardes las cosas importantes para ti, sé honesto contigo mismo y con la otra persona. Es fundamental decir la verdad para poder avanzar en la vida y para que las relaciones fluyan mejor. Piensa solo en presente. En ocasiones, cuando surge el pensamiento negativo del temor a no ser amada, la persona se centra en un futuro que visualiza como negro y dramático. Por ello, ten en cuenta que la mayoría de los peligros que imaginamos nunca llegan a hacerse realidad. Vive el día a día y serás más feliz.
Quiérete a ti mismo, y verás que el amor propio también ayuda a tener una buena autoestima. Para finalizar, pierde tu deseo de no ser querido, siendo selectivo en tus relaciones personales: recuerda que no todo vale con tal de estar acompañado. Es importante aspirar a algo mejor y tener un nivel de exigencia interno que te permita diferenciar al cariño verdadero de los sucedáneos del amor, que a la larga, te hacen sentir vacío.