Existen relaciones de pareja insanas en las que uno de los dos se siente asfixiado por los comportamientos del otro. Existen distintos tipos de personas tóxicas. Un ejemplo de actitud dañina es la tacañería emocional. Una actitud que es insana porque es contraria a la esencia del propio amor que invita a compartir. ¿Cómo puedes identificar a un tacaño emocional? Sientes que no importa lo que hagas ya que nunca tiene una palabra de reconocimiento o de admiración para ti.
Pocos piropos y muchas quejas
Ya no recuerdas cuándo fue la última ocasión en la que te ofreció un elogio. Un tacaño emocional también muestra el perfil de aquella persona que quiere recibir mucho pero a da muy poco a cambio. Desde esta perspectiva, es alguien que defiende sus muchos derechos pero no tiene en cuenta sus propios deberes.
La tacañería emocional conduce a la pobreza de afectos que afecta a la autoestima de aquel que no se siente amado de verdad por su pareja. Un ejemplo de tacañería emocional es no preguntarle a la pareja qué tal se lo ha pasado con sus amigos en un plan concreto y en lugar de eso, recibirle con reproches y quejas constantes.
El tacaño emocional se comporta como si por el hecho de demostrar ese afecto fuese a acabársele ese cariño. Que alguien tenga esta actitud no significa de una forma necesaria que no ame a su pareja sino que debe aprender a amar de una forma sana.
Solo piensa en sus intereses
Un tacaño emocional también es una persona que tiende a pensar en sus intereses y deja en un segundo plano los deseos de su pareja. Por ejemplo, al ir al cine, le cuesta ceder para ver un estreno que no le interesa demasiado pero que sí es una preferencia para su pareja.