No solo los novios son protagonistas el día de la boda, también lo son los invitados. Personas que están presentes y acompañan a los enamorados en un día tan significativo. ¿Cómo pueden los novios transmitir este mensaje a los invitados?
Escribiendo un mensaje personalizado
Algunas bodas se convierten en multitudinarias y el riesgo de ello es que puede caerse en la percepción de un trato impersonal porque los novios no tienen tiempo de detenerse para charlar con calma con cada uno de los invitados. ¿Qué escribir en un mensaje personalizado?
Por ejemplo, unas palabras de gratitud o una idea que resuma la importancia del vínculo tenido con esa persona. Este mensaje puede enviarse a través de la comunicación tecnológica a sus destinatarios o, también, expresarse de manera presencial en una conversación directa. Una fórmula recomendable para poner en práctica la inteligencia social.
Lectura de una carta
En este día, no solo puede tener protagonismo el amor, sino también, el afecto en general. Uno de los miembros de la pareja también puede leer una carta dedicada a los invitados en la que, desde la creatividad y la libertad interior, exprese aquello que considere importante en ese momento.
Evitando las invitaciones por compromiso
Cuando una pareja invita a alguien por compromiso, el invitado también lo percibe porque se encuentra en la misma posición respecto de la relación. Por el contrario, cuando dos personas invitan a alguien con ilusión, este efecto emocional también se contagia.
De hecho, lo ideal es que la boda no solo sea protagonista del entorno en el mismo día, sino también a través de los recuerdos. Por ejemplo, la pareja puede compartir con sus invitados algunas fotografías del álbum o comentar anécdotas del destino elegido para la luna de miel.
Por tanto, el día de la boda es una jornada significativa no solo para la pareja, también para los asistentes.