La comunicación asertiva implica expresar tus emociones y sentimientos de una forma madura, sin interferir en los derechos del otro. Se trata de hablar desde el yo, sin utilizar los ataques personales o los reproches para comunicar una idea. Sin embargo, en las relaciones de pareja, muchas discusiones comienzan precisamente por el uso de palabras hirientes que lejos de potenciar el diálogo separan a las dos personas. La comunicación asertiva es aquella que también está acompañada por la escucha activa. Por difícil que sea un tema de conversación para dos personas, siempre puede sobrellevarse mejor cuando se adopta la actitud asertiva de hablar desde el sentimiento interior.
Además, en realidad, cuando dos personas tienen una gran confianza, en realidad, debería ser más sencillo romper las barreras internas para poder ser uno mismo frente al otro y no tener miedo de qué hará, qué pensará o qué dirá. Es mejor afrontar las cosas a tiempo y no dejar que un tema se posponga durante muchos meses porque la situación se agrava.
Para mejorar la comunicación asertiva en pareja empieza por ponerla en práctica. Por otra parte, busca el lugar y el momento adecuado para hablar de temas importantes, intentando que tu pareja y tú también, os sintáis lo más cómodos posibles en dicha conversación. No es una buena idea ocultar sentimientos, emociones o preocupaciones porque todo esto, cuando se tapa, sale a la luz con más fuerza en algún momento.
También es un error ocultar un enfado. Si hay algo que te ha molestado y que te ha herido es mejor que lo comentes cuanto antes porque todo aquello que queda interno, hace más daño que lo que se dice porque una vez que se dice, es más fácil, afrontarlo y superarlo. La comunicación asertiva es muy importante, y como tal, también es un aprendizaje.