No hay nada peor que sufrir una ruptura. Por lo general, estás cosas se producen por sorpresa y suelen ser un duro golpe para nuestra autoestima. Luego llega el momento de contarlo. Amigos, familiares, etc. todos te escucharán pero lo peor será cuando veas parejas por todos lados que irradian amor. El ser parte de una ruptura puede hacer que el mundo parezca un lugar cruel y despiadado, pero es necesario que te recuperes rápidamente.
Para ayudarte a recuperarte rápidamente y con tanta fuerza como sea posible, puedes seguir algunos de los consejos que siempre te hemos dados pero, debes tener cuidado con el tema de los amigos. El primero de ellos es confiar en tus amigos. Los buenos amigos siempre van a estar a tu lado cuando lo necesites. Los buenos amigos siempre te darán un hombro sobre el que llorar, te comprarán unas cervezas y te ayudarán a ahogar tus penas con unas buenas risas.
Eso sí, tampoco abuses de tu suerte. Tus amigos estarán viviendo sus propias vidas por lo que no debes exigirles demasiada atención. Asegúrate de que eres realista en lo que a atención se refiere. Tus amigos no tienen el trabajo de estar a tu entera disposición. Recuerda que parte del proceso de una rápida recuperación está en encontrarse a uno mismo de nuevo.
El mundo no gira alrededor de tu ruptura. Los buenos amigos sin duda te prestarán atención durante las primeras etapas de tu separación, pero no se les puede obligar a tener que coger tus llamadas por qué no te apetece hablar, no puedes convertirles en tus chicos de los recados, etc. Lo único que puedes conseguir haciendo estas cosas es hacer que tus amigos se vayan de tu lado.