La presencia real no tiene nada que ver con el espacio físico. El hecho de tener a alguien a tu lado no significa que realmente esté contigo. Puede tener la mente a miles de kilómetros, intereses que no tienen nada que ver con los tuyos y deseos que no conoces. Por ello, cuando esta situación se prolonga a lo largo de los meses o de los años, alguien puede tener una pareja ausente. Alguien que en realidad, actúa con indiferencia a nivel interior aunque trate de disimularlo, nunca está en los momentos realmente importantes, se comporta de una forma que no te llena y que te hace sentir tristeza. ¿Qué hacer ante una pareja que está a medias?
En primer lugar, pensar en qué te mantiene a ti atado a una situación destructiva a nivel emocional: ¿Por qué estás con alguien que en realidad, se comporta como si no quisiera estar contigo? Por otra parte, el segundo paso es exteriorizar la situación, hablar de qué te pasa y tomar conciencia. En muchas ocasiones, los problemas están allí, pero hay personas que creen que es más cómodo mirar hacia otra parte que encarar los problemas de frente y mirar la realidad tal y como es por mucho que duela. A la larga, duele más una situación oculta pero ante la que no se puede actuar con indiferencia. Empieza a reconstruir tu vida y tu mundo: ante una pareja ausente, las personas suelen apoyarse mucho más en la amistad o en la familia.
Toma lo positivo de una situación así: puedes ser mucho más consciente de tu fortaleza y de tu independencia. Por esta razón, toma las riendas de tu vida, decide qué quieres hacer y ve a por ello. Pero únicamente, dándote la oportunidad de estar solo de verdad podrás conocer a alguien especial.