Un desamor es una experiencia amarga, que duele. Y en este vacío interior que puedes sentir tras un desengaño amoroso, el cariño de la amistad es el mejor protector emocional. Es decir, los momentos compartidos con amigos, amortiguan el salto al vacío de ese dolor que genera incertidumbre. La amistad es curativa, precisamente, porque te ayuda a conectar con el presente. Porque te hace tomar conciencia de que algo ha terminado en tu vida, pero hay otras cosas que continúan: la amistad es una de ellas y además, también es uno de los bienes más importantes de la existencia.
Beneficios de la amistad
Además, un desamor también te deja la enseñanza práctica de lo importante que es aprender a valorar a los amigos en todo tipo de situaciones. De lo contrario, quienes tienden a dejar de lado las relaciones de amistad en una etapa de feliz enamoramiento, pueden sentirse doblemente solos después de la ruptura.
La amistad aporta consuelo. Es verdad que los consejos de los amigos no hacen que tu dolor se vaya de golpe tras la herida, sin embargo, el consuelo es un alivio muy importante que hace que la tristeza pese menos. Además, con los amigos también compartes bromas, comentarios constructivos, silencios y rutina.
La medicina de la amistad
La amistad te ayuda a mirarte a ti mismo con buenos ojos, puesto que el amor es una fuente inagotable de autoestima. Pero existen distintos tipos de amor. La amistad es una de las medicinas más saludables. No puedes delegar tu responsabilidad de tomar decisiones en tus amigos, sin embargo, sí puedes encontrar inspiración para tomar mejores elecciones en el futuro gracias a la sabiduría que interiorizas en los espacios de retroalimentación típicos de la amistad. Los consejos de tus amigos te dan ideas. Algunas te ayudarán más y otras menos. Pero todas ellas son útiles porque te aportan luz y te amplían la perspectiva.