Casarse no es una elección fácil y debes estar muy seguro de ti mismo y de la otra persona. Pero a veces decides casarte por una razones que van a hacer que ese matrimonio no llegue a buen puerto.
– Casarse sólo por dinero
Casarte exclusivamente por dinero, independientemente de tus sentimientos hacia la otra persona, es un error. Si estás tan desesperado busca otra solución: préstamos, ayuda familiar, etc. pero no vendas tu vida y tu alegría a alguien sólo porque tiene dinero y con esa persona vas a poder salir del bache en el que te encuentras.
– Embarazo inesperado
Conoces desde hace poco a la otra persona o tal vez ha sido una noche pasional, pero ha sucedido: te has quedado embarazada o la has dejado embarazada. Tranquilizaros, estas cosas suelen pasar si no se ponen medios o hubo algún fallo. No tenéis por que casaros. Debéis hablar de lo sucedido y decidir que decisión queréis tomar sobre el tema, pero la mujer es la que va a tener la última palabra.
– Quieres huir de tu casa
¿Crees que si las cosas no van bien en tu casa o con tu familia, casarte es la solución? Piénsalo detenidamente y verás cómo puedes encontrar muchas más soluciones, además recuerda que también están en juego los sentimientos de la otra persona, no puedes utilizarla.
– Queréis tener niños
Hoy en día no es necesario casarse para tener niños. Existen ya un montón de trámites legales que pueden salvaguardar a la criatura de futuros trámites legales, así que no os obsesionéis con casaros primero ya que para tener un hijo biológico no es necesario. El problema se puede presentar a la hora de realizar adopciones, entonces sí es posible que tengáis más problemas.