Es importante poner en claro los efectos de las interacciones entre dos parejas (antes desconocidas entre sí) en sus relaciones. Se ha observado que cuando las parejas comparten información personal con otras parejas, consiguen acercarse más el uno al otro. En el plano social, las personas que nos rodean juegan un papel fundamental para influir en nuestras relaciones.
Se ha realizado un estudio en el que se examina cómo la cercanía de una pareja se ve agravada por la interacción con otra pareja que no se conocía previamente. No hay evidencia experimental para apoyar la hipótesis de que las fuertes interacciones sociales fortalecen las relaciones entre las parejas. El mecanismo que se pone en funcionamiento en este momento es el de descubrir cosas nuevas acerca de la pareja.
El estudio se realizó con 60 parejas de diversidad étnica, que llevan saliendo por lo menos un año. La intimidad de su relación es lo que se ha tratado principalmente y, además de rellenar unos cuestionarios al inicio del estudio tuvieron que hablar durante 45 minutos con otra pareja. Los efectos de estas interacciones entre las parejas en términos de una mejor intimidad se analizaron. Como resultado se obtuvo que los individuos en el grupo de alta divulgación, aprendieron más cosas acerca de sus respectivas parejas que los del grupo que mantuvieron una charla muy corta.
El estudio supone que la cercanía dentro de la pareja es una consecuencia del efecto positivo durante la interacción de la pareja-pareja. Eso sí, estos datos obtenidos pueden no ser apropiados para extrapolarlos a las parejas casadas que llevan muchos años juntos.