Es necesario manejar algunos principios básicos para mantener la seguridad y evitar dañar al vehículo ocasionándole desgastes innecesarios. Si, además, tu pareja hace la función de copiloto experimentado, tienes mucho ganado.
Debes reunir ciertas aptitudes físicas y psicológicas para obtener el permiso de conducción. Así, la capacidad de respuesta rápida y precisa será un requisito imprescindible.
Aunque vayas acompañado de “tu amorcito” no descuides la atención en carretera. El ser humano no puede atender a muchos estímulos a la vez… Mientras menos objetos haya que atender, mayor será la posibilidad de concentrar y distribuir la atención entre cada uno de ellos.
Tu pareja ha de conseguir que adquieras una posición tranquila para que te centres en el control del vehículo, la observación del tráfico y la percepción y análisis del entorno (señales, estado de la vía, etc).
Las distracciones pueden estar ocasionadas por elementos internos del vehículo (como un cigarro o los navegadores), por elementos externos (como los anuncios publicitarios, las obras en la vía o un paisaje) y por el estado y comportamiento del conductor, por ejemplo, la preocupación por un problema laboral o familiar.
La conducción de vehículos es potencialmente estresante y por ello es importante aprender a conducir relajados y evitar situaciones estresantes, en especial al conducir a una velocidad inadecuada para la vía. Por ello, es importante también descansar cada cierto tiempo para que nuestro organismo descanse y se recupere.
Pero te animamos a que te conviertas en un conductor competente. He aquí alguna de sus ventajas:
1. Independencia en los horarios.
2. El conductor se hace responsable de la máquina y eso le da seguridad y confianza en sí mismo.
3. El conductor ve beneficioso para su familia tener un medio de transporte propio.
4. Aprende a solucionar problemas de una forma rápida y efectiva.
5. Si trabaja bien puede incrementar sus ganancias.
6. Puede conocer a diferentes personas e interactuar con ellas.