Una historia de amor es una relación compleja en la que se armonizan diferentes realidades. Pese a que una historia de amor está formada por dos personas que caminan en la misma dirección, en realidad, en cualquier noviazgo o matrimonio existen tres elementos fundamentales a tener en cuenta.
Yo
Una persona no se fusiona con la otra en el noviazgo sino que mantiene su individualidad e independencia. Cuando tienes pareja tienes que conciliar tus sueños, metas y objetivos a nivel individual con la relación. En ocasiones, tienes que establecer prioridades. Por ejemplo, una persona que tiene pareja e hijos puede no querer viajar por motivos de trabajo para no estar lejos de los suyos.
El yo es muy importante en una relación de pareja cuando se trata de medir el grado de satisfacción a nivel individual con la relación.
Tú
Cualquier persona que tiene una relación de pareja sabe que la otra persona es tan importante como ella misma en el seno de la historia. Entre el yo y el tú se crea un vínculo especial en el que la comunicación es muy importante para que las dos subjetividades no terminen encerradas en sí mismas.
El diálogo muestra la esencia de una relación de pareja en la que es importante llegar a acuerdos y conocer de verdad al otro para amarle tal y como es. Es imposible querer a alguien a quien no conoces.
Nosotros
La tercera realidad del amor se muestra en ese espacio creado por ambos que remite al nosotros. Una pareja que goza de buena salud utiliza con frecuencia este término que refleja la sensación de equipo que define el amor. En una relación de pareja feliz, una persona desea el bien del otro porque sabe que ese bien también es un beneficio para sí misma.