La convivencia es una prueba de fuego para el amor, de hecho, no tiene nada que ver la fase del noviazgo con la rutina de ver día tras día a la otra persona en cualquier momento cotidiano. Por supuesto, si una relación va bien, la convivencia puede ser una ganancia al tener más intimidad con la pareja, pero en cambio, si la historia se tuerce, entonces, la relación está en peligro de muerte.
La convivencia puede fortalecer el amor
La convivencia puede fortalecer una historia de amor porque la confianza entre dos personas es mayor, al compartir más tiempo en común y formar un proyecto de futuro. Pero para que eso suceda, hace falta mucho trabajo por parte de la pareja, es necesario tener comprensión, confianza, empatía, generosidad y mucho cariño hacia el otro y también, hacia uno mismo.
Pactos de pareja para convivir
Existen pactos que pueden ayudar a tener las cosas más claras antes de dar el paso de compartir piso. En primer lugar, conviene precisar cómo manejar el tema de las finanzas: la economía también es la base del amor y cuanto más claro esté todo desde el principio mejor.
Por otra parte, también es bueno hablar previamente si existen deseos de tener hijos por ambas partes, o no. Estar en desacuerdo respecto de esta cuestión, causa frustración a una de las partes. Y en caso de querer tener niños: ¿Quién se encargará principalmente de su cuidado?
Por otra parte, conviene llegar a acuerdos para repartir las tareas del hogar entre los dos. En cuarto lugar, es importante acordar que cada uno tenga su propio espacio. Y para finalizar, y muy importante: ¿Existe algo a lo que no estés dispuesto a renunciar a pesar de tener pareja? En ese caso, conviene que se lo digas para que lo sepa.