¿Buscas unas joyas únicas para el día de tu boda? Lo mejor de todo es que puedes hacértelas tu misma. Además de ahorrarte algo de dinero, podrás hacerte unas joyas inolvidables que podrás utilizar para otras ocasiones. Deberás comprar: bolas o piezas decorativas, agujas, hilo, cierres, pegamentos y unas tijeras.
Lo primero que debes hacer es visitar alguna de las tiendas especializadas en piezas para elegir las que más se adaptan a tu vestido y a tu estilo en general. Puesto que se trata de joyería para una boda, las perlas son muy recomendables. Falsas o reales, dependerá de ti elegir lo que mejor se “adapte” a tu bolsillo. También puede sutilizar cuentas de acero. Elige los colores que más te gusten y que vayan acorde con tu vestimenta.
Una combinación perfecta entre perlas y cuentas de acero puede ser una de las mejores opciones. Selecciona cuentas con agujeros de un tamaño aceptable de forma que no te sea muy complicado introducir la aguja con el hilo que finalmente unirá toda la “joya”. Aparte de hilo, puedes utilizar goma de forma que la joya se adapte mucho mejor a la zona del cuerpo en el que la vayas a poner.
Lo más recomendable es que utilices materiales de calidad, sobre todo el hilo o la goma que te comentábamos anteriormente para que tu creación no se rompa durante la celebración. También necesitarás cierres para concluir tu joya. El pegamento es necesario para asegurar los nudos en los extremos y el cierre. Utiliza un buen pegamento. Las tijeras te ayudarán a cortar los restos sobrante. No dejes que se vean los hilos o las gomas y asegúrate de recortar todo a la perfección.