El amor verdadero se construye día a día porque ningún para siempre se alcanza si no es a través de los pequeños pasos que van creando una convivencia positiva en una pareja. Un proceso que tiene su inicio incluso antes del propio noviazgo, cuando una persona comienza a sentirse interesada por otra y tiene la duda de no saber si es correspondida. El amor verdadero es un reto para el corazón humano, un reto que es todavía más complejo ya que su conquista no depende únicamente de la voluntad individual sino que se requiere de un compromiso mutuo. La confianza y la fe en el otro también forman parte de la receta de una relación feliz. ¿Cómo construir las bases de una historia de amor?
Disfruta de cada etapa como un proceso
Es fundamental que disfrutes de cada etapa como un proceso, no te adelantes a tu propio ritmo, tómate las cosas con calma. Disfruta de tu historia como única e irrepetible ya que aunque el amor es un sentimiento universal, no existen dos vivencias que sean iguales. Las etapas del amor son importantes porque nos indican si debemos seguir avanzando o no en una historia. La etapa del noviazgo es determinante para conocer al otro y descubrir el grado de compatibilidad.
Convivir con la incertidumbre
Incluso las personas que han compartido su vida en común y han celebrado sus bodas de oro han descubierto que la única forma de alcanzar el amor verdadero es convivir con la incertidumbre. El amor se nutre de muchas certezas pero también, puede quedar algún espacio para la duda.
Además, el amor también parte de un proceso de conocimiento personal que no se puede delegar en manos del otro. Para mejorar tu relación de pareja también tienes que fortalecer el vínculo que tienes contigo mismo. El respeto hacia el otro parte del respeto hacia ti mismo (nadie da lo que no tiene).