La ilusión es ese ingrediente que te ayuda a vivir mejor tanto en los buenos momentos como en los malos. Sin embargo, a veces, tener ilusión implica hacer un esfuerzo extra, es decir, requiere de fuerza de voluntad porque no se produce por arte de magia. Pues bien, en el amor sucede algo parecido, tras años de amor, es normal que en cierto modo, la ilusión de la novedad desaparezca. Por ello, es uno mismo quien debe empezar a trabajar con más fuerza una historia para poder seguir con ganas de sorprender al otro y de conocerle.
En realidad, nunca se termina de conocer a una persona. Allí reside la clave a la hora de entender que el aburrimiento, en realidad, no existe. ¿Cómo se puede potenciar la ilusión? Haciendo planes en común, tanto como pareja como con los amigos comunes. Del mismo modo, también es bueno pasar tiempo en familia. Por otro lado, cualquier día es bueno para hacer un regalo a esa persona que es especial para ti.
Aprende a disfrutar del mismo modo un lunes que un sábado. Al final, la semana es muy larga, sin embargo, hay personas que viven a la espera de que llegue el fin de semana porque viven en medio del estrés y de la rutina. La ilusión es como una chispa de felicidad que si se trabaja puede derivar en un sentimiento más profundo de gozo y alegría.
Por supuesto, también se debe cultivar la ilusión de la amistad. Felicitar a los amigos en los cumpleaños, hacer planes en común con regularidad, mantener el contacto… Por otro lado, un signo de vitalidad es el hecho de tener la mente abierta para conocer nuevas personas y dejar que el mundo te sorprenda. Son los demás los que te ayudan a dejar de lado la soledad.