Cinco tipos de amigos que contagian energía negativa


Vivimos momentos muy felices gracias a la compañía de nuestros amigos pero en la amistad también es posible experimentar la frustración de la energía negativa. Esa energía que se contagia a través de actitudes que enumero a continuación. ¿Qué cinco tipos de amigos proyectan una carga de negatividad? El quejica que encuentra reproches incluso en aspectos que desde tu punto de vista son objetivamente buenos.

El quejica

El queijca interpreta la realidad siempre desde la balanza de aquello que falta. Esta perspectiva aporta tristeza incluso al más optimista.

El víctima

Algunas personas pasan mucho tiempo de su vida en el rol de víctima. ¿Cómo identificar a un amigo con este perfil? Imagina que quedas con él para tomar un café y contarle un asunto que te preocupa, sin embargo, pronto desvía la conversación, te quita el turno de palabra y comienza a relatar aquello que le ha ocurrido a él porque es peor que lo que tú le estás contando. Para aquel que vive como víctima, todo aquello que le sucede siempre es peor que lo que pasa a los demás.

El sabelotodo

El amigo que «lo sabe todo», tiene una visión distorsionada de sí mismo, sin embargo, él se cree muy capaz y competente en muchas áreas. Tanto que corrige constantemente a los demás. Cuando vivimos esta situación en primera persona, nos sentimos imperfectos y nuestra autoestima se ve afectada.

El que siempre te da la razón

Tener una conversación con una persona que siempre te da la razón porque lo que busca es agradar, hace que los planes sean bastante aburridos. Cuando vais al cine le preguntas qué película le gustaría ver, pero siempre te dice que elijas tú. Delega de una forma permanente con las ventajas e inconvenientes que eso tiene.

El amigo ausente

El amigo ausente es aquel que aparece y desaparece de tu vida de un modo habitual sin una explicación lógica. Le envías mensajes que no contesta. Y sin embargo, a pesar de todo, te habla con palabras que te generan falsas expectativas de amistad que luego se frustran en la realidad de los hechos.

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