Platón afirma: «La mayor declaración de amor es la que no se hace, el hombre que siente mucho, habla poco». Un mensaje que en el contexto de las redes sociales también podría ayudarnos a reflexionar sobre las contradicciones de la comunicación afectiva cuando es posible dedicar un mensaje íntimo a la pareja a través de este medio y, sin embargo, no tener el mismo tipo de detalles en persona. ¿Cömo saber si una demostración de amor es sincera? Atendiendo a las palabras pero lo más importante, a los hechos de esa persona ya que son las acciones las que muestran un esfuerzo, un compromiso y una coherencia.
Causa de sufrimiento
Una de las mayores fuentes de sufrimiento es la que viven aquellas personas que no saben si su pareja les quiere de verdad porque más allá de las promesas, los hechos rompen estas expectativas. Este tipo de contradicción produce confusión en el receptor de ese mensaje. ¿Cómo salir de dudas en este tipo de contrariedad? Dando valor a los hechos, aunque duela asumir su significado. No se trata de analizar una acción de una forma aislada sino de realizar un balance objetivo de las actitudes de la pareja para poder trascender más allá de ellas.
El efecto que produce en ti esa demostración de amor
El amor tiene una lógica intrínseca. Cuando tu pareja te regala una demostración de amor sincera te sientes bien contigo mismo ya que la verdad del propio sentimiento transmite vitalidad. En cambio, cuando se produce algún tipo de malestar interior de un modo frecuente, una insatisfacción personal, conviene escuchar ese sentimiento para analizar qué está pasando. Con frecuencia, esa voz interior nos da información valiosa sobre nuestra propia felicidad.
También conviene puntualizar que una persona puede proyectar sus propias inseguridades personales en su pareja, en cuyo caso, es positivo hacer autocrítica para eliminar ciertas carencias afectivas.