El amor es un sentimiento que nace del corazón pero también, de la mente. Con un concepto de racionalidad mal entendido, el amor muere. Es importante buscar el equilibrio entre entendimiento, sentimiento e intuición para alcanzar la armonía en la balanza de los afectos. ¿Cómo amar con el corazón? Tómate tu tiempo para conocer a tu pareja incluso cuando hace años que le conoces. Las parejas no evolucionan en paralelo a nivel personal, cada ser humano tiene su ritmo, sus gustos, sus prioridades…
Espera recibir amor
Evita convertir en una verdad universal mensajes del tipo: «Amar es dar sin esperar recibir nada a cambio». Lo cierto es que es muy saludable que también te sientas amado por esa persona que tanto quieres.
Ama los defectos de tu pareja
Amar las virtudes de la pareja es relativamente sencillo puesto que estas fortalezas muestran su brillo personal. Sin embargo, amar sus defectos es más complejo. Requiere de un proceso de madurez y aceptación que te resultará más sencillo cuando tomes conciencia de que tu pareja también tiene paciencia contigo al convivir con tus debilidades.
Reparto de las tareas de la casa
El amor no solo se muestra en detalles románticos sino también, en aspectos más domésticos. Es muy importante colaborar por igual en la realización de las tareas de la casa a partir de un reparto equitativo de las ocupaciones. Sobrecargar al otro con todas las tareas pasa factura en la relación en forma de frustración, ira acumulada y enfado.
Pactos de pareja
Cada pareja es un mundo que puede gestionarse a partir de unos pactos y normas aceptadas libremente. Potencia la comunicación para llegar a acuerdos, comparte tus puntos de vista pero escucha también con paciencia las observaciones de tu pareja. Y concreta pactos que repitan el esquema de yo gano-tú ganas.
Siente la gratitud
Siente la gratitud de poder compartir tu vida con una persona a la que quieres, a quien valoras y respetas. Y si un día te das cuenta de que no amas a esa persona, entonces, sé honesto.
Muy buena la información